PLANES EN PERÚ
La mejor fiesta de carnavales la organizó DTYF en Asia. Conoce todos los detalles
El verano no solo trae sol, playa y bebidas refrescantes; también la espectacular fiesta de carnavales organizada por la productora DTYF que, esta vez, se desarrolló en el Boulevard de Asia. Revivámosla juntos.
Las fiestas que organiza Don’t Tell Your Friends (DTYF) tienen estilo y una certeza: siempre serán divertidas.
Razones hay muchas: su exclusividad, sus locaciones, sus conceptos (siempre diversos, siempre disruptivos), su diseño, la gente que convoca, la buena música que en ella se escucha y nos hace bailar y por supuesto, la calidad de lo que en ellas se bebe, cócteles deliciosos y destilados top, es decir, los que integran el portafolio Reserve de Diageo.
El pasado 8 de febrero, en el Boulevard de Asia, se llevó a cabo su segunda edición. Hasta ella llegaron más de mil personas atraídas por el prestigio y creatividad de Don’t Tell Your Friends, como esta fiesta no habría otra. No se equivocaron. Conozcamos por qué.
LOS CARNAVALES LLEGARON, QUE LO SEPA TODO EL MUNDO
A toda fiesta carnavalera que valga la pena hay que ir disfrazado y, en este terreno, la creatividad peruana suele ser desbordante. El año pasado, DTYF retó a sus fans sugiriéndoles como temática el cine, sus películas y sus personajes icónicos; este año, el reto fue más grande: la historia y la cultura, tanto erudita como popular.
Por eso, sus más de mil asistentes llegaron disfrazados de centuriones romanos, de estrellas de fútbol (sí, porque es fútbol es cultura pop en su máxima expresión), de hippies setenteros (créannos, el espíritu libre de Woodstock se respiraba en el Boulevard de Asia), de vikingos barbados y salvajes (porra en mano), personajes de cuadros icónicos, científicos geniales, todos una obra de arte.
A pesar de los disfraces, todos se reconocían porque su objetivo era el éxtasis de la armonía total, armonía a la que contribuía la buena música que en la fiesta sonó a cargo del DJ Yisus, uno de los más capos de la ciudad, quien, como buen conocedor de la juventud limeña, supo dosificar las armonías hasta alcanzar verdaderos clímax armónicos.
Los cócteles y destilados corrieron a cargo de Diageo y sus destilados top. Como parte del diseño del espacio, por todos los ambientes se podía ver al siempre chic caminante de Johnnie Walker, emblema del whisky preferido de los peruanos.
Ese dorado caminante también se lucía en los carritos cocteleros repartidos por el local, desde donde se servían los dos cócteles creados para la ocasión, ambos con whisky Johnnie Walker, dos “welcome drink” ideales para iniciar una noche propicia: Rich & Smoky Manhattan y Smooth & Citrus Mule.
Rich & Smoky Manhattan no es un Manhattan, al menos no al estilo clásico, pero mantiene su impronta. Sus ingredientes: whisky Johnnie Walker Black Label, vermú rosso, un bitter aromático y, luego, la travesura: soda italiana de mellograno y arancia (es decir, granada y naranja) y, como garnish, cereza y arándanos. Rojiza profundidad. Se sirve en copa balón y con mucho hielo, por favor.
El Smooth & Citrus Mule es un homenaje a los Mule, tan de moda estos días en el mundo. En un hermoso y llamativo vaso de cobre se mezcla 1.5 onzas de whisky Johnnie Walker Black Label, miel citrus, un bitter de naranja, soda italiana de limón y, como garnish, hierbabuena. También mucho hielo, señor bartender.
Con el cuerpo refrescado y dispuesto, y la música al máximo, el carnaval supo ser pleno, más aún porque se crearon algunas lúdicas activaciones como una “photo opportunity”, concurso en el que, luego de hacerse una foto con el caminante, los participantes recibían una llave para abrir un cofre del tesoro, cofre que en su interior contenía oro puro: una botella de whisky Johnnie Walker. ¿Acaso algún descubrimiento arqueológico encerró tanto festejo?
Pero, así como hubo whisky, también se sirvieron destilados como el tequila Don Julio en varias de sus etiquetas: Blanco, Reposado, Añejo y Don Julio 70. ¿Un gin tónic? Con gin Tanqueray N° Ten y, por qué no, en sus coloridas y frescas versiones: Tanqueray Flor de Sevilla y Tanqueray Royale Dark Berry.
El peruano es ronero, por eso, no faltaron las bonitas botellas de ron Zacapa 23 y XO y, por supuesto, el revitalizado vodka Smirnoff porque, en esta época de revivals históricos, el vodka está volviendo con mucha fuerza, sobre todo entre los más jóvenes, el público de esta fiesta carnavalesca.
Las primeras luces del sol llegaron. El cuerpo pedía descanso. Habíamos saltado, bailado, cantado, bebido. Habíamos sido parte de una de las mejores fiestas del verano. DTYF inaguró el mes de los carnavales. Seguimos agradecidos.
*TOMAR BEBIDAS ALCOHÓLICAS EN EXCESO ES DAÑINO