Conviértete en un experto en whisky

1. Mantenlo puro y simple

Nivel de esfuerzo: Sin esfuerzo

El whisky puro se sirve solo y sin ningún líquido adicional que pueda modificar su sabor original o nivel de dilución. La mejor forma de experimentarlo solo es servir un trago de 45 ml de whisky a temperatura ambiente, directo de la botella en un vaso de rocas o vaso Glencairn, los cuales están “diseñados para mejorar y enriquecer tu olfato y experiencia de degustación del whisky”. Se supone que el whisky puro se bebe lentamente, permitiéndote apreciar los matices y probar sus sabores únicos. Para profundizar, mantén las notas de degustación detalladas, observando la apariencia, los aromas y la sensación en la boca del whisky, además de la progresión de sabores. Estarás listo para convertirte en experto.

“Ya que beber whisky puro comienza mínimo con un 40% de graduación alcohólica, se necesita poco tiempo para que el paladar se abra. Comienza inicialmente percibiendo los aromas antes de tomar el primer sorbo, y luego mantén el líquido en el paladar pocos segundos antes de iniciar el proceso de degustación otra vez. Descubrirás más cada vez”.

2. En las rocas, o con unas cuantas gotas

Nivel de esfuerzo: Fácil

Muchos amantes del whisky disfrutan de un trago con hielo o agregando unas cuantas gotas de agua para permitir que el whisky se abra y para que lleguen más aromas y sabores. Una forma de subir de nivel tu experiencia “en las rocas” es crear cubos de hielo especiales con cítricos, amargos o incluso adornos florales. Si bien estos cubos de hielo mejorados requieren algo de trabajo de preparación, son un excelente complemento para tu whisky.

“Científicamente, cuando agregas agua al whisky, aumenta ligeramente la temperatura para permitir que se liberen más aromas y sabores. Agregar hielo al whisky técnicamente suprime los aromas y sabores, pero durante el verano y en climas más cálidos, no hay nada que disfrute más que un trago en las rocas. Entre más hielo tengas, menos se diluye y se mantiene frío más tiempo. Como me gusta decir: ‘El hielo conserva lindas las cosas’”.

3. Mézclalo con otros sabores

Nivel de esfuerzo: Fácil

La versatilidad del whisky le permite mezclarse bien con otras cosas, incluyendo una variedad de mixers o gaseosas complementarias. Cuando buscas una manera sencilla de modificar tus cócteles con whisky, probablemente ya tengas los productos en tu cocina. El agua con gas, el ginger ale y el refresco de cola son mixers clásicos para whisky que agregan un toque de efervescencia. Para sabores más avanzados, prueba jugo de toronja, unas cuantas gotas de amargos aromáticos o vermú (se recomienda el dulce, pero el seco también sirve), los cuales agregan una complejidad agradable. O si estás buscando una bebida típica para el frío, intenta agregar sidra de manzana caliente o café.

“Mis maridajes favoritos con mixers para whisky son, sin ningún orden en particular, Lagavulin y refresco de cola, Johnnie Walker y ginger ale ("Johnnie & Ginger"), chocolate caliente y Talisker The Singleton y agua tónica de pepino. Pruébalos y ve qué te parece”.

4. Viaja al pasado con los cócteles clásicos

Nivel de esfuerzo: Medio a alto, dependiendo del cóctel

Los cócteles con whisky clásicos han sido respetados por cientos de años. Si bien todos los buenos cócteles requieren de un pequeño esfuerzo para obtener el equilibrio perfecto de sabores, algunos son más simples que otros. Un Old Fashioned, cuya fórmula puede datar de 1806, se prepara tradicionalmente con amargos de Angostura y está decorado con un toque de naranja, pero siempre puedes darle tu propio toque a un clásico.

“Amo experimentar con amargos. The Singleton 18 combina de maravilla con los postres, por lo que me gusta optar por amargos de chocolate y adornar con romero tostado para obtener una presentación lujosa y reconfortante para el frío”.

5. Combínalo con alimentos complementarios

Nivel de esfuerzo: Medio

Muchos expertos recurren a maridajes de alimentos para mejorar su experiencia de degustación de whisky, ya sea refrescando sus paladares entre sorbos o elevando los sabores naturales del whisky con alimentos complementarios, tanto salados como dulces. The Singleton se acompaña clásicamente con postres ricos y lujosos, pero si quieres ser aún más específico, podemos analizarlo aún mejor: The Singleton 12 combina bien con fruta, avellanas y pasas gracias a sus notas de azúcar morena suave y espresso; mientras que The Singleton 15 es una explosión de notas de frutos rojos maduros, ciruela y fruta cocida, las cuales contrastan de maravilla con una barra de delicioso chocolate oscuro con jengibre; y por último, The Singleton 18 es un acompañamiento encantador para una trufa de lujo o macarrón de coco, el cual resalta las notas de fruta tropical del whisky. 

“Como un whisky de malta de perfil marítimo, Talisker se acompaña de manera magnífica con ostras, pero uno de mis mejores maridajes es Lagavulin y queso azul. Sabrás por qué en cuanto lo hayas probado”.

6. Crea un bar de whisky en casa

Nivel de esfuerzo: Alto

Instalar un bar de whisky en casa es un paso en un siguiente nivel para quienes aman el whisky y quieren crear un espacio en el cual puedas explorar, relajarte, crear y compartir experiencias memorables. El primer paso es surtir tu colección con unas cuantas botellas que representen varios estilos y regiones, incluyendo una mezcla de whiskies de malta, whiskies de mezcla, y whiskeys americanos. A medida que crezca tu colección, puedes considerar agregar nuevos lanzamientos o de edición limitada.

También querrás invertir en una selección de vasos para whisky, incluyendo vasos de Glencairn, los cuales están diseñados para concentrar y encauzar los aromas del whisky hacia la nariz, permitiéndote apreciar completamente los matices de la bebida. Accesorios especializados como las piedras de whisky (diseñadas para enfriar tu bebida sin diluirla) y los cuentagotas de agua elevarán sin duda tu experiencia de cata de whisky.

7. Organiza una fiesta de degustación

Nivel de esfuerzo: Experto

El whisky siempre sabe mejor con amigos. Prueba llevando a cabo una reunión de degustación con una variedad de botellas para combatir algunos de los eternos debates, desde muy ahumado contra sin turba, hasta el whisky de malta contra el whisky de mezcla (blended Scotch), o Speyside contra Highland (o cualquier otra batalla regional en ese caso). Asegúrate de haber conseguido los vasos adecuados, ofrecer agua entre degustaciones para limpiar el paladar, y como un pequeño favor, regala a tus invitados cuadernos de cata que puedan conservar fuera de la fiesta.

8. Infusiones de whisky

Las infusiones de whisky han ganado popularidad en años recientes como una forma creativa de encontrar nuevos sabores. Mediante la infusión de whisky con ingredientes tales como frutas, especias, hierbas o incluso otros tipos de alcohol, puedes crear bebidas únicas y personalizadas. Crear una infusión de whisky te da un control total, permitiéndote crear un whisky único, ya sea solo, en las rocas o en un cóctel.

Si bien el proceso de infusionar whisky es en realidad bastante simple (elegir un ingrediente, servir whisky sobre él en un envase de vidrio y dejarlo reposar en un lugar frío y oscuro por días o semanas) puede requerir algo de experimentación para conseguir el equilibrio indicado.

Tanto si eres un conocedor del whisky o un principiante aventurado, dedicarse a la infusión de whisky seguramente llamará la atención.