Alta Gama Liquorfest: Johnnie Walker Blue Label y los spirits más exclusivos

 

La feria de destilados más importante del país, el Alta Gama Liquorfest, fue una fiesta máxima gracias a la presencia del portafolio más exclusivo de Diageo, empresa líder mundial en bebidas espirituosas, quien convocó a los bartenders más competentes de la ciudad para crear cócteles que derrocharon elegancia y mucha creatividad. Un verdadero espectáculo.

El Alta Gama Liquorfest, es una suma de emociones y de grandes impresiones. Esta feria, que reúne a los destilados de lujo más importantes que se ofertan en el mercado peruano, se realiza todos los años en los amplios jardines del centenario y muy elegante Country Club Lima Hotel.

El Alta Gama Liquorfest convoca al lujo y a la exclusividad, por eso, el portafolio de lujo de Diageo tiene un lugar de honor. Sin temor a equivocarnos podemos afirmar que Diageo, la transnacional de bebidas alcohólicas más grande del mundo, por su impresionante y llamativa presencia, fue el mejor expositor de la feria.

Las razones para esta afirmación son muchas. Después de cruzar el lobby del Country y divisar el jardín desde su señorial balcón, uno queda estupefacto ante la imponente barra central que la marca Johnnie Walker Blue Label había montado. 

Consistía en una alta torre circular de varios metros de altura, coronada por el azul intenso del Blue Label. Debajo de la torre, en un armonioso círculo, se ubicaban cuatro de los más experimentados bartenders del país, cuya misión era sorprender a los asistentes del Alta Gama Liquorfest con algunas dosis del whisky Johnnie Walker Blue Label en estado puro y, por supuesto, con sus cócteles de autor desarrollados con los más exclusivos destilados de Johnnie Walker. Mejor bienvenida, imposible.

Pero había más. Al pie de las escaleras, en una de las más hermosas suites del Country, se instaló el Blue Room, icónico espacio donde unos pocos privilegiados, de la mano del experto en bebidas Bruno Ferrari, vivirían una experiencia top que tendría al lujoso whisky Johnnie Walker Blue Label, el Blended Scotch más prestigioso que existe, como protagonista.

En el otro extremo del jardín, a pocos metros de la Torre Blue Label, se ubicaba la barra de The Singleton, el single malt que hoy se impone en el mundo gracias a su versatilidad y elegancia. 

Pero para quienes preferían lo lúdico, lo refrescante, lo colorido, en la nave central de la feria tenían a la mano la barra de Tanqueray, de donde salían los cócteles más consumidos del evento, unos preparados con los siempre sorprendentes y vistosos gines Tanqueray Sevilla, Tanqueray Royale, Tanqueray London Dry y el Tanqueray N° Ten, ese portento. 

“Los collins han vuelto con todo”, nos dice Alexander Loaiza, joven pero experimentado bartender que dirige la barra del gin Tanqueray. “Por eso, hemos creado el Collins Ten, que lleva gin Tanqueray N° Ten, jarabe de Jamaica, limón y toronja rosada. Es un cóctel cítrico, directo, con mucha estructura y color y, de paso, muy fácil de preparar, pero de extrema calidad gracias a las bondades del gin”, prosigue Loaiza. Y tiene razón, hoy los collins son una bendición.

Es decir, gracias a su amplio portafolio, calidad y exclusividad, Diageo tomó por asalto el Alta Gama Liquorfest. Puro goce.

 

VARIOS CÓCTELES, UN SOLO OBJETIVO: PLACER

El lujo, la elegancia y lo excepcional son las señas distintivas de los destilados de Diageo. Sabedores de estas cualidades, Mauricio de la Puente, Luis Alza, Alessandra Dejo y Gustavo Arone, cuatro de los mejores bartenders del Perú, se instalaron en la barra Blue Label y dieron rienda suelta a su talento usando como base cuatro de los más exclusivos whiskies que existen: Johnnie Walker Gold Label, Johnnie Walker Double Black, Johnnie Walker Black Label y Johnnie Walker Swing. Su objetivo, otorgar placer a través de un cóctel.

Luis Alza, ganador en 2022 de la edición Perú del World Class, el concurso de coctelería más prestigioso del planeta, se impuso como tarea convencer a los asistentes que un Johnnie Walker Swing puede mezclarse y al hacerlo, seguir siendo una maravilla. 

El whisky Johnnie Walker Swing está elaborado con una mezcla de 35 whiskies de grano y malta. Su largo añejamiento da como resultado cierta complejidad y un hermoso tono a oro viejo. Su creador, Sir Alexander Walker, pensó a Swing como ideal para los viajes transatlánticos, por ello su icónica botella convexa que nunca parece perder el equilibrio.

Quizás por esto, Alza bautizó a su cóctel como “Normandie”, un famoso transatlántico que surcó los mares del mundo durante los años 30 del siglo XX. “El Johnnie Walker Swing es fresco, salino y dulce a la vez, como la brisa del mar. Por eso, este highwall sigue sus descriptores clásicos y los potenció con licor de marrasquino, cítricos y ginger ale”. En efecto, el Normandie nos hizo viajar por todos los mares del mundo. Pura frescura.

Alessandra Dejo, experimentada barwoman del clásico restaurante Rosa Naútica, eligió como destilado base para su creación al también clásico Johnnie Walker Black Label. 

Por la rapidez en su elaboración, lo bautizó como That Quickly. Servido en un highball lleva, además del Black Label, una dosis de un licor aperitivo italiano, un toque de vermú blanco extra dry y gotas de un bitter Palmer. “Me gusta el Johnnie Walker Black Label por su toque ahumado, ahumado que tiene fuerza y presencia, pero no es invasivo”, explica mientras nos recuerda que fue finalista en la edición 2017 del World Class Perú.

Mauricio de la Puente, bartender con 15 años de experiencia, hizo el cóctel más complejo de la barra. Lo llamó “Transparente”.  Su base, el estupendo whisky Johnnie Walker Gold Label Reserve. Sus acompañantes hacia la excelencia, jerez clarificado, un mix de manzana, un jarabe de avena y canela, shoyu, salsa inglesa y, como decoración, un tocino vegano marinado en whisky. Alucinante.

“Elegí el whisky Johnnie Walker Gold Label Reserve porque, además de complejo y elegante, es dúctil, amigable e ideal para las mezclas más atrevidas, como Transparente, mi cóctel para Diageo en el Alta Gama Liquorfest”. A veces hay que agradecer atrevimientos de esta magnitud. 

Inspirado en el cine de acción, Gustavo Arone, barman de Troppo, uno de los restaurantes ineludibles de esta Lima golosa, creó “El Asesino”, un cóctel aperitivo que resaltaba todas las bondades ahumadas y salinas del whisky Johnnie Walker Double Black.

Gran conocedor de whiskies, Arone nos dice que quiso reforzar la mineralidad del Double Black mezclándolo con un licor de alcachofa, vermú rosso, un licor italiano de pino y cacao. Un coctelazo, ideal para los amantes de los aperitivos con cuerpo, potencia y majestuosidad.

En la muy acogedora barra del tequila Don Julio se sirvió un cóctel de talla mayor. Su nombre es Candelaria. Su creador, John Rojas, bartender finalista de la edición 2023 del World Class Perú. Sus ingredientes, tequila Don Julio reposado, licor de higos, jarabe de vainilla, un sour mix de camu camu, toronja rosada, limón sidra y una solución salina.

"Es un trago refrescante que se inspira en la margarita clásica", nos dice Rojas, quien tiene al tequila Don Julio como uno de sus destilados favoritos por su perfil cítrico y notas tostadas, ideales para las mezclas más traviesas. Candelaria es deleite en estado puro... con ligeras notas cítricas y ahumadas.

Antes de salir de la feria, era ineludible pasar por la barra del single malt whisky The Singleton, donde el cusqueño Óscar Figueroa, finalista del World Class 2023, demostraba por qué es uno de los valores de la coctelería peruana a seguir. En su “Dofftown Punch”, The Singleton 12 fue mezclado con jerez, vermú blanco y jugo de toronja. Un vicio. “The Singleton hermana muy bien con mi coctelería, una que propone tragos ligeros, expresivos, bajos en alcohol, pero con mucho atrevimiento y personalidad”, afirma Figueroa mientras los asistentes se aglomeran a su alrededor. El Alta Gama Liquorfest es una fiesta, y el portafolio de Diageo, el feliz animador de una noche espléndida.